07 marzo 2006

Nos hicieron una pregunta 15 años atrás

Me acuerdo cuando nuestro profesor de historia, Chiapella, en 3er año de la secundaria entra un día a clase, con su sobretodo largo y su actitud ávida de imponer respeto (miedo?), nos pregunta: ¿Qué es el amor para ustedes?

[silencio]
[nos miramos pensando qué tendrá que ver con la materia... le respondo?, no es tan difícil la pregunta... yo hablo...]
Todo lo que fuimos repondiendo nos lo rebotó como si no le acertáramos al número de la ruleta. Y él seguía... quién da más?

15 años después me levanté pensando en ese momento, en esa pregunta y en esas respuestas. Solo quiero acercarme a lo que pienso, siento y desatar así algunos nudos; puedo equivocarme mucho, y además muchos ya hablaron renglones y renglones sobre esto.

Solo voy a escribir sin detenerme, no es algo que tengo pensado.
Se siente algo fuerte en el medio del pecho, como una piedra que te aprieta sin poder sacártela. Eso pasa cuando pensás en el otro, cuando lo ves o simplemente cuando te lo quedás mirando mientras duerme a tu lado.
Cuando te abraza o te toca y sentís que el resto del escenario se desvanece y que no importa nada más por esos instantes.
Te importa lo que le importa, te interesa saber qué le gusta, por qué le gusta y si pudieras se lo regalarías con un moño.

Cuando dos personas se atraen, creo tiene que ver con que uno ve en el otro todo eso que queremos y a veces lo que deseamos de nosotros mismos. Si es sincera y fuerte esta atracción, sentimos que el otro es lo más, no hay nada ni nadie igual y nos hace sentir que nosotros mismos podemos ser increíblemente lo más también.

Sin embargo todavía no llegué al meollo de lo que significa amor.
Dénme una segunda oportunidad... ya vuelvo.

(sigue)

4 comentarios:

celemin dijo...

Como sigue, espero a ver el resto para decir algo :)

Anónimo dijo...

Una advertencia preliminar: ayer me acosté a las 3AM, o sea, me acosté cuando ayer, y con cierta holgura, ya era hoy (que se le va a hacer, vivir y trabajar en Bs.As. es como estar dentro de una multiprocesadora). Adcierto esto porque, quizá, el cansancio haga algo caótico e incomprensible este comentario.
En fin, al grano. Conozco a ese profesor (o debí decir: padecí a ese profesor) pero había olvidado completamente su interpelación acerca de qué es el amor, de la que fui testigo/víctima.
Hoy tengo la misma sensación que hace 15 años, la sensación de saber la respuesta y, sin embargo, no poder transmitirla. Veamos si fracaso o si saco un digno 7, como para promocionar.
Más allá del sustrato químico que pueda causarlo, creo que existen algunas pautas claras que (a menos que no se quieran ver) revelan que lo que se siente por otro es cualitativamente distinto (y para bien) de un cariño proporcionador de algún respiro fisiológico.
Así, existen ocasiones en las que uno advierte que el otro (el/la amado/a) es algo así como indispensable (qué sentido tendría la vida sin él/ella? Ninguno, claro). En esos casos, donde uno se divierte, se admira, se entretiene, planifica, sufre y consuela, en fin siente una comunión particular incompatible con mezquinos fraudes humanos, todo junto, podrá decirse que existe amor.
Que no puede durar? No lo se, si estás verdaderamente enamorado, contra todas las evidencias que la rutina ha dejado en tus conocidos, seguirás creyendo que el amor es eterno.
Que te pueden gustar otros? Sí, claro, eso no es del orden del amor, te pueden gustar, y qué?
En fin, espero promocionar, qué nota me pondrá Chiapella?

atandocabos dijo...

Sin duda se siente así ...existen ocasiones en las que uno advierte que el otro (...) es algo así como indispensable (qué sentido tendría la vida sin él/ella? Ninguno, claro).

Ud aprobó 15 años atrás y lo aprobaría de nuevo sin respirar. No se si recuerda que ese año me llevé la materia, cómo me costó estudiarla! No se si tenía que ver con el profesor (evidentemente todavía lo recuerdo), con las "supuestas" independencias latinoamericanas que aprendimos o con que me quería quedar con recuerdos como éste y poder tratar de disolver algunos grumos que van quedando en nuestra biografía.

Anónimo dijo...

Se impone el trato de usted, lo acepto (¿será para diferenciarnos del "voseo" tan popular en las cercanas tierras uruguayas, en estos tiempos de pasteras y cortes?). Veo que cree identificarme (pese al anonimato de mi comentario), pues bien, le diré que va por el camino correcto si supone que aprobé la materia. Ahora bien, fue un arduo trabajo no llevarmela a diciembre, creo que di cuanto recuperatorio circulaba por ahí. Eso sí, jamás me olvidé quién era Morelos.